La producción sustentable de leche en México es fundamental para garantizar la rentabilidad del sector, la seguridad alimentaria y la conservación de los recursos naturales. Dado que el país enfrenta retos como la escasez de agua y el cambio climático, es crucial optimizar el uso de insumos, reducir la huella ambiental y mejorar el bienestar animal. Adoptar prácticas sostenibles no solo disminuye costos de producción, sino que también permite acceder a mercados nacionales e internacionales que exigen estándares ambientales y de calidad, asegurando el crecimiento y competitividad del sector lechero mexicano a largo plazo.

La integración de los ganaderos productores de leche en la cadena de valor en México es clave para mejorar su competitividad, estabilidad económica y acceso a mejores mercados. Al fortalecer la relación con procesadores, distribuidores y comercializadores, los productores pueden asegurar precios más justos, mejorar la calidad de su leche y acceder a tecnología e innovación. Además, una integración eficiente permite reducir costos de producción, optimizar la logística y cumplir con estándares exigidos por la industria y los consumidores, garantizando la sostenibilidad y crecimiento del sector lechero mexicano